lunes, 31 de diciembre de 2018

Gracias


Hoy es el último día de 2018, y quiero aprovechar para dedicar unas palabras a una persona que encontró respuestas para algo que me atormentaba desde hace mucho tiempo: se trata del Dr. Fernando Pulgar Martín, dermatólogo.

Desde los 30 años llevo padeciendo una dolencia en la piel que, dicho en pocas palabras, es un enrojecimiento que pica mucho. Solo me aparece en verano, pero es tan molesto, que parece que dura todo el año.

Pues bien, por una de tantas vueltas que da la vida, fui a parar a la consulta del Dr. Pulgar. Hasta ese momento me habían atendido muchos especialistas, pero en ninguno vi el interés y la dedicación recibidos. Lo cierto es que el Dr. Pulgar es una persona muy joven, pero es tanto lo que sabe que no puedo evitar especular con todo el tiempo que ha debido pasar estudiando para dar solución a sus pacientes, en vez de irse a fiestas o discotecas: por fin la psoriasis no va a j**** más.

En fin, para terminar, sólo espero que el 2019 depare al Dr. Pulgar Martín el mayor de los éxitos y el reconocimiento que se merece. Muchas gracias.

sábado, 8 de diciembre de 2018

Ya es diciembre


En un rato me tomaré un té con limón y luego saldré a comprarme algo de ropa. No puedo salir aún porque tengo que hacer cosas en casa.

Tengo metido en la cabeza el pumpapachún de unos vecinos, y no me deja centrarme. Igual cambiaba mi planificación si supiera que a la vuelta estaba el patio en silencio, pero me temo que no va a ser así, y yo no puedo pasar todo el día fuera de casa. Hoy es sábado y se puede meter ruido hasta las dos de la madrugada.

Seguro que en la cervecería de al lado hay más silencio. Y mejor música, aunque cualquier música es mejor que esa mierda que suena. Pensar que genera millones es insultante. ¿Dónde está la música de verdad? En la Luna, seguro.

Ya es diciembre y los villancicos me horrorizan, pero empiezo a echarlos de menos. No tienen ese bum, bum, bum que se clava en el cerebro y te lo tritura. Yo no sé quién inventó ese engendro de ruido, pero me voy a acordar de su padre mientras suene.